Levantarme bien temprano por la mañana y una rosa en la cama, mirar por la ventana y no ver nada. Solo arboles y pajaros, montañas y leves ruidos. Naturaleza y mas naturaleza...
Digan lo que digan todos tenemos un lado salvaje, impredecible, aún para nosotros mismos,que te alejan por momentos de la cordura.
Pero necesario...
Para no convertirnos en seres aburridos e inertes.