Hay una persona cercana que aveces le oigo decir que hay días que es mejor no despertar,que no llegue el sol o al menos que no llegue para ti. Yo creo que ese día era uno de esos. No se si por el continuo escalofrío de mi cuerpo, por un presentimiento, intuición o sexto sentido. O tal vez por los gritos que desprendía mi corazón, el auxilio o miedo que tenia. Le escuchaba rogar y pedir un poco de paz. Me puse unos auriculares y el volumen mas alto.
Se fue.
Aún hoy no ha vuelto.